¿Soy una mala mamá por tener una niñera?

Comenzamos un nuevo mes, le damos la bienvenida a junio. En este mes ocurrirán algunas cosas importantes, entre ellas el tan esperado día del padre. Cada año se dedica un día en especial a esos hombres que hacen de la vida de sus hijos un mundo más feliz.

Muchas mamás celebran junto con ellos y agradecen que exista este día, pero hay algunas que se sienten un poco frustradas porque no pueden estar con sus hijos las 24 horas o tanto tiempo como ellas quisieran pues el día a día y las responsabilidades laborales se los impide (y a papá también) y por eso optan por contratar una niñera.

¿Es malo tener una niñera en casa?

No es malo. Los niños siempre necesitan atención, sobre todo mientras son más pequeños, y si mamá no se la puede dar, no es porque no quiera porque nada le hace más feliz a una mamá que poder disfrutar de sus hijos todo el tiempo, es porque las obligaciones se lo impiden.

El rol de la mujer en la familia ha cambiado mucho en las últimas décadas. Ya pasó de ser esa ama de casa que pasa el día entero cuidando a los niños y atendiendo los oficios del hogar, para ser esa mujer emprendedora dueña de su propia empresa, ejecutiva con un cargo en una oficina y un horario que debe cumplir o simplemente una mamá que tiene que salir a la calle a hacer cualquier trabajo que contribuya a mantener la economía del hogar. Pero, ¿y los niños?

Las niñeras: la gran solución

Cuando no está papá y no está mamá y tampoco hay una figura como una abuela o una tía, nada mejor que contratar a una persona profesional en este oficio que sea capaz de atender y suplir todas las necesidades del niño mientras su mamá no está en casa.

Una niñera es una persona que se dedica a este trabajo y tiene experiencia en el cuidado, educación, atención e incluso alimentación de los niños, por lo cual contratar una de ellas es una buena decisión para asegurarte de que tu pequeño tenga la atención que necesita.

Olvídate de la palabra ‘culpable’

Si hay algo que sienten muchas mamás es culpa. Culpa por no estar suficiente tiempo con sus hijos, culpa por no haber estado cuando se cayó en el parque, culpa por no poder ir a recogerlo a la escuela, culpa por no tener tiempo para jugar con él y hacer las tareas… un mar infinito de culpas.

Es cierto que toda mamá tiene que reorganizar su vida cuando nacen los niños y tratar de añadir “horas extras” a su rutina diaria para poder compartir con ellos el tiempo que necesitan, pero hay que recordar una frase que se menciona muchísimo y es que “no es tan importante la cantidad como la calidad”.

Disfruta del tiempo que tienes con ellos

Siempre habrá un rato libre en el que llegues a casa y puedas compartir con tus hijos, un fin de semana o un viaje de vacaciones en el que tu tiempo sea mucho más flexible y puedas disfrutar de su compañía. En esos momentos no necesitarás a la niñera así que no la llames, disfruta ese momento ‘a solas’ con tus hijos.

¿Qué opinas de este tema? ¿Te has sentido culpable por tener que dejar a tus hijos con una niñera?

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