Una de las precauciones que siempre debemos tomar las mamás cuando viajamos es llevar nuestro maletín de primeros auxilios para el bebé. No es que salgamos pensando que se van a enfermar ni mucho menos, sino que es importante que tomemos todas las precauciones posibles.
Sin embargo, por más que tomemos precauciones, siempre puede pasar un contratiempo y es posible que el bebé se enferme, en ese caso ¿qué debemos hacer? Lo primero es conservar la calma y ser objetiva, a continuación, te voy a dar 4 consejos que te ayudarán a manejar la situación de la mejor manera.
No intentes diagnosticar a tu hijo si la enfermedad no es fácil de identificar
Lo primero que debes comprender es que tú, aunque seas su mamá y sepas (o creas saber) todo lo que tu hijo tiene, no eres médico. Así que, si la enfermedad que se presenta no es algo que sea fácil de identificar como una fiebre, tos o gripa, entonces lo mejor es que suspendas el viaje y acudas lo más pronto posible al pediatra, recuerda que la salud del bebé debe ser siempre tu prioridad.
Las diarreas son frecuentes en los bebés y se pueden presentar por múltiples factores, no serán signo de alarma a menos que notes alguna coloración extraña o que tengan sangre, si no es así, solo procura abastecerte muy bien de pañales y darle una buena hidratación al bebé.
Haz uso de tu kit de primeros auxilios
Es posible que, si hay un cambio de clima o de altura, incluso los cambios en el ambiente, cualquiera de esas cosas podría afectar al bebé. En ese caso lo que es más probable es que le de alguna fiebre no muy alta o cólicos, como ya te hemos recomendado antes, cuando viajas con bebés siempre debes llevar medicamentos para la fiebre, las alergias, gripe y al menos un termómetro.
Eso no es solo para llevarlos en la pañalera, es para que los uses, cuando sientas alguna anomalía en tu bebé, tómale la temperatura y si está un poco elevada dale el medicamento para la fiebre. Apenas veas alguna reacción alérgica, dale el antialérgico.
Con esto no quiero decir que ya de esa manera el bebé se curará inmediatamente y podrás seguir con tu viaje como si nada, es bueno que hagas una pequeña pausa y lo observes por unas horas, si los síntomas no ceden entonces es mejor que acudas al pediatra y sigas sus recomendaciones.
No te alarmes demasiado
Si bien es cierto que a todas las mamás nos preocupa cualquier malestar en nuestro hijo, también es cierto que con exagerar y armar dramas no lo vamos a curar, así que lo mejor es que puedas tomar la situación con mucha calma y evaluar bien lo que está ocurriendo para que puedas tomar la acción más oportuna.
No es que porque sentiste que tu bebé tenía un poco de fiebre ya vas a interrumpir por completo tus vacaciones y lo vas a llevar a una clínica pidiendo que lo dejen en observación, si llegaras a hacer eso, lo más probable es que en la clínica le den un poco de acetaminofén para bajarle la fiebre y te digan que lo lleves a casa.
Ten siempre el número de tu pediatra a la mano
De la mano con nuestro primer consejo y sabiendo que no vas a diagnosticar tú misma a tu hijo, sí es bueno que lo observes muy bien y si ya le has dado medicinas y no ha reaccionado o notas algunos síntomas fuera de lo común, lo mejor es que llames por teléfono a tu pediatra y le comentes lo que ocurre. Él te dirá que es lo más prudente que puedes hacer, es posible que creas que es más grave de lo que realmente es, pero lo mejor es asegurarse consultando con un profesional.
Finalmente, recuerda que tus vacaciones son un momento para divertirse en familia, así que es muy importante en esos días que procures el descanso de todos. No tengas miedo de posibles enfermedades y no te vuelvas paranoica, los bebés son delicados y fácilmente se pueden enfermar con los cambios de ambiente, de clima, e incluso con los cambios de rutina, así que lo mejor que puedes hacer es estar preparada.
Y estar preparada significa que, en caso de que se llegara a presentar algún motivo de fuerza mayor, puedas interrumpir las vacaciones para acudir al pediatra, si es realmente necesario.
¿Qué opinas sobre este tema? ¿Tienes alguna recomendación para cuando los bebés se enferman durante un viaje?
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