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La lactancia materna es el acto más tierno, más noble y el más importante que puede realizar la madre una vez que ha nacido el bebé. Se trata de la leche materna, que constituye el alimento natural más completo que se le puede suministrar al recién nacido hasta los 6 meses o más en algunos casos.

Se recomienda, de ser posible, amamantar al bebé por un periodo de un año como mínimo, que sería el ideal, apróximadamente. Ya que la leche materna es el alimento exclusivo, por contener todos los nutrientes imprescindibles para su correcto desarrollo y crecimiento.

Además de los nutrientes necesarios, la leche materna contiene las inmunoglobulinas y otras sustancias que van a proteger al bebé de posibles infecciones en el futuro, y sumado a esto, también el acto de amamantar acrecienta el lazo afectivo entre madre e hijo, favoreciendo de esta manera, el desarrollo psicomotor del bebé.

La primera leche materna que recibe el bebé, se denomina el calostro es una leche amarillenta y espesa y es la más nutritiva  que puede recibir el niño recién nacido, en este tipo de leche inicial, están presentes los nutrientes y los anticuerpos que fortalecen el sistema inmunológico y revisten la pared intestinal.

En todo caso, el tiempo de amamantar va depender en gran medida de la capacidad de producción de leche de la madre. En este tema trataremos el por qué hay madre que producen más leche que otras.

¿Por qué hay madres que producen más leche que otras?

Generalmente existe un temor infundado en las madres y una duda las asalta una vez que nació el bebé, y esa duda se refiere a que si tendrá la suficiente leche, si su bebé irá a pasar hambre y si podrá alimentarlo correctamente.

Hay que tener siempre muy en cuenta, que la leche materna es el alimento ideal y más importante para el recién nacido, por contener los nutrientes y anticuerpos necesarios para el desarrollo del bebé.

También es necesario tener en cuenta que no se puede medir la cantidad de leche que tomará el niño como normalmente se haría con el biberón. Y es aquí cuando surge la pregunta: por qué unas mujeres tienen más leche que otras?

La poca producción de lecha materna se denomina hipogalactia, aunque esto no es motivo para la madre decir que su lactancia es un fracaso porque no producía suficiente leche, que su bebé pasa hambre, etc. Esto pasa en un porcentaje, afortunadamente, bastante bajo de mujeres lactantes.

La hipogalactia es la situación en la que la madre lactante no produce la cantidad suficiente de leche que permita satisfacer las necesidades alimenticias del bebé en los primeros días de nacido, por lo que es necesario recurrir al biberón.

El caso contrario a la hipogalactia se denomina hiper galactia o hiper lactante, y se da en mujeres que son muy buenas productoras de leche materna, es decir, que llegan a producir leche de manera excesiva.

¿Qué es lo que importa en estos casos?

Lo que importa en todo caso, es que el bebé este muy bien alimentado, lo que pasa, es que generalmente solemos hacer comparaciones de madres lactantes y desde luego también incluimos a los bebés lactantes.

Hay mujeres que producen mucha leche y requieren llevar protectores de pecho permanentemente, sus bebés se atragantan y engordan de una manera rápida, casi que diariamente, es decir tienen los pechos constantemente ingurgitados.

Lo contrario, ocurre también en aquellas madres, que no necesitan llevar ningún protector de pecho, no manchan la camisa, y dan la impresión que no tuvieran leche, y sin embargo y afortunadamente, los bebés son sanos, felices y están bien alimentados y engordan de manera correcta.

Salvo a casos excepcionales de hipogalactia, cada mujer lactante va a producir la cantidad necesaria y suficiente que cada bebé requiere al momento que lo desea.

La producción de leche es a demanda

La producción de leche materna debe adaptarse a lo que el bebé demande, es decir, a mayor oferta y mayor estímulo de parte del bebé, mayor será entonces, la producción de leche.

Por lo que debes dar alimento a tu bebé cada vez que lo quiera, sin regirte por horarios estrictos y otros controles más que los de la disciplina de alimentación que debes ir estableciendo a medida que el bebé crece.

Es por esto, que las comparaciones no son convenientes ni valederas, entre dos mujeres ni entre dos bebés. Lo que en definitiva importa, es que ambos estén bien, que la madre por su lado, no tenga problemas, dudas, dificultades, y que el bebé crezca de manera feliz y sana.

¿Qué opinas este tema? ¿Hay algún otro consejo que tengas sobre la producción de leche materna?

Este y otros temas de interés estarán siendo ampliados en nuestro seminario taller Lo que nadie te cuenta de la maternidad próximamente en la provincia de Chiriquí el 22 de Septiembre. Mantente atento a nuestra página web para que puedas separar tu cupo.

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Viajar con tu bebé nunca ha sido tan fácil…

Imagen vía WikipediaImages.com bajo licencia creative commons.

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