Si hay algo que llama la atención de todos en la familia y siempre da mucho de qué hablar es un embarazo, sobre todo si se trata de una mamá primeriza. Muchos querrán opinar y darte sus consejos y decirte cómo debes hacer las cosas, pero lo mejor que podemos decirte y que puedes hacer, es vivir tu experiencia tu misma y seguir al pie de la letra los consejos de tu médico.
Anteriormente te hemos hablado de temas importantes para las mamás que deberías saber cómo son el puerperio (esos días de los que casi nadie te habla) y la lactancia materna más allá de lo que tradicionalmente te dicen, pero hoy queremos hablarte de otros tips y consejos importantes para ti en este primer embarazo.
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Muy importante: cuida tu piel
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano, pues lo recubre por completo. Muchas veces la descuidamos y no prestamos suficiente atención a los cambios que sufre. Durante el embarazo es el período donde mayor trauma sufre, se estira muchísimo (sobre todo en el área abdominal) y luego debe retomar su forma, lo cual ocasiona las tan temidas estrías.
Para evitar las temidas estrías hay ciertos trucos que pueden ayudarte:
- Manten humectada la piel de tu vientre, senos y piernas, en el mercado hay cientos de cremas antiestrías pero lo más importante es que la mantengas humectada.
- La piel tiende a picar mucho porque se está estirando pero debes evitar a toda costa rascarte con las uñas, ten a la mano siempre una esponjita suave o un guante que te ayuden a aliviar un poco el escozor.
- El aceite de naranja es ideal para aplicarlo luego del parto, ayudará a la piel a volver a su forma natural sin complicaciones.
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La lactancia duele, está preparada
No es que duela como tal, eso lo escucharás decir mucho, pero lo que duele son las grietas que se hacen en los pezones si éstos no están bien lubricados. Sabes que no puedes aplicarte cremas cosméticas pues podrían dañar al bebé y no siempre el agua tibia funciona lo suficientemente bien, por eso un truco increíble es aplicarte unas gotas de vino tinto en los pezones una hora antes de amamantar y luego de hacerlo humedecer un algodón con el vino y limpiarlos bien, esto ayudará a mantener la piel de esa zona bien humectada, sin grietas y sin riesgos de que pueda hacer daño a tu bebé.
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Tú eres la mamá
Como te decía al principio, todos querrán opinar: abuelas, primas, tías, suegras, hasta la mascota de la casa si tú se lo permites, pero en definitiva tienes que hacerles saber que aunque aprecias sus consejos y su experiencia, este es tu momento y lo quieres vivir y disfrutar a tú manera.
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Tu médico: tu mejor consejero
Es muy importante que acudas a tu control cada mes y que escuches muy bien todo lo que tu médico tiene que decirte: las cremas que deberías usar, vitaminas que debes tomar, precauciones con respecto a tu peso, y demás.
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El mito de los tacones
Eso de que una mujer embarazada no puede usar tacones no es más que un mito. Ocurre lo siguiente: en el cuerpo tenemos una especie de eje de gravedad que es nuestro punto de equilibrio, a medida que avanza el embarazo ese eje se va rotando por el cambio que ocurre en el cuerpo.
Se asocia con el uso de tacones pues el punto de equilibrio para manejarlos se desplaza, por ende se hacen más complicados de manejar, lo cual te pone en un riesgo mayor de caídas, pero si eres capaz de controlarlos bien entonces no hay ningún problema.
¿Tú qué opinas? ¿Tienes algún otro consejo para las mamás primerizas?
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Viajar con tu bebé nunca ha sido tan fácil…
Imagen de COM SALUD vía Flickr.com bajo licencia creative commons.
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